En 32 el Rey Rama III ordenó que se grabara en piedra todo lo que se recordaba de aquél legado histórico; el día de hoy podemos ver apartados gráficos en WAT PHO, el templo budista más grande Bangkok. (Gratitud para el profesor más importante contemporáneo Chaiyuth Priyasith) Puesta a contarte, prefiero contarte lo que en las fotos no ves. Y lo que no ves en las fotografías es que soy una mujer simpática y apasionada, dulce y fogosa, una pantera en celo a la que le gusta gozar del sexo sin barreras ni límites. Imagina lo que desea decir eso y el placer que puedes probar al lado de una mujer como . Y también imagina sin miedo a pecar de lascivo. Yo te daré todo cuanto desees. Llámame. Te espero con muchas ganas. Con esto, deseo que entiendas que eres responsable de tu vida y de tu felicidad solamente. Eres un ser completo y en el momento en que te sientes de esta manera, es entonces que puedes compartir tu vida con alguien que esté en sintonía. No te preocupes por buscar, la persona indicada llega siempre y en todo momento en el instante justo gracias a la ley de la atracción. Tu trabajo es querer y confiar. En seres sociales como , la toma de conciencia es un estado que no se alcanza siempre y en toda circunstancia en soledad. No somos siempre y en toda circunstancia mismos los que tomamos conciencia de algo; son el resto los que nos la hacen tomar. Es el ojo social el que nos fuerza muy frecuentemente a pensarnos, a concienciarnos en una situación o en una acción específica. Son los otros, los padres, los amigos, los maestros, los que en la mayoría de ocasiones nos otorgan la conciencia. La primera vez que nos dicen eso no se hace, eso no se toca, eso no se dice o bien eso no se piensa es en el momento en que nos vemos a nosotros mismos haciendo, tocando, diciendo o bien pensando eso.

¿Qué es el amor? el amor está en la carne y la pornografía

Torbe quería rodar unas escenas con Lucky para su web Putalocura y la persona que se ocupaba de recoger a las actrices le había fallado a última hora, Bruno y le hicimos el favor de ir a procurarla con el turismo a la T4 de Barajas en un vuelo que llegaba de madrugada cuando ya no había transporte publico para moverse por la capital española. El chemsex, apuntan los expertos, no es una práctica nueva. En mayor o bien menor medida, siempre ha existido. Si ahora se ha hecho más popular es solo debido a la influencia determinante de un fenómeno relativamente nuevo: el de la expansión de las aplicaciones para móviles destinadas a posibilitar todo tipo de encuentros sexuales. Gracias a estas aplicaciones, los amantes del chemsex pueden localizarse entre sí y citarse con absoluta facilidad. Una vez ya el hombre se haya presentado de cualquier forma. Mantente simpática y refrescante. Habla de temas impersonales pero interesantes. El amor comienza con un intercambio de miradas. Se simpática mas no demasiado. El exceso de sinceridad es mala. No afirmes todo lo que sabes. No digas tus verdades. No hables de tus ex parejas. No hables de tu pasado. No charles nada negativo. No regales ninguna información. Cuanto más discreta seas mejor. A los hombres les agrada un toque de misterio y nocturnidad. Que avive su deseo y su curiosidad. La sombra de un secreto es muy, muy interesante.

Si hablas con una mujer y empieza a jugar con su pelo, es un deseo subconsciente (al comienzo) de que la estuvieses tocando. Si respondes bien, su deseo se vuelve consciente y ella empieza a emplear la señal como una activación. Es un signo de exceso de nerviosismo sexual o bien de su intento de tentar a un hombre a imaginar que está jugando con su cabello. Dependiendo del estado anímico de la mujer, las mujeres con pelo largo a menudo dejan que se mueva sobre un ojo para lograr el efecto peekaboo o para lucir glamorosa a la Lauren Bacall. Una de las maneras más populares en que una mujer emplea su pelo, como de una cita, es darle una vuelta mientras mira al hombre. Respuesta: El personaje del Don Juan y el de Casanova han despertado siempre sumo interés. A diferencia de Giaccomo Casanova, personaje real que escribió sus aventuras amorosas de corte casi gimnástico en sus famosas Memorias, Don Juan Tenorio es más literario que real, producto de la pluma de Tirso de Molina (hay versiones de Zorrilla, Lord Byron y Molière), inmortalizado por Mozart en su ópera Don Giovanni. Incluso cuando no haya tenido existencia concre­ta el anclaje del mito tiene mucha fuerza y es real que determinados varones adoptan actitudes donjuanísticas. El Don Juan mí­tico es intemporal, un anarquista del amor: ignora la felici­dad, la virtud o bien la decencia, considera válida cualquier arma para seducir: en la guerra y en el amor todo vale, y es un profesor que no tiene presente los sentimientos de las mu­jeres que abandona, por el hecho de que solo le interesa el momento de placer y el triunfo permanente sobre la mujer que somete y el marido que logra coronar. Hay múltiples teorías sobre estos personajes que van desde la busca desesperada de la figura materna, hasta los sentimientos homosexuales latentes por el placer que conseguirían al introducir en su cama al marido ultrajado. Todas y cada una estas son referencias al sentido simbólico, claro está. Por otra parte, existe un deseo prácticamente incesante de dar fe de su virilidad que, quizás, en la amedrentad tambalea. En la ópera de Mozart aparece todo el tiempo a la vera de Don Giovanni, el personaje del joven Leporello, que nos plantea la pregunta de si es un ver­dadero otro yo o el eterno acompañante homosexual no concientizado del seductor. Posiblemente en estos perso­najes se vislumbre una verdadera imposibilidad de perma­necer en los aprecios con una sola mujer, y la necesidad incesante de enamorarse y de desamparar al objeto amado.

Este no es otro que LELO, una de las marcas más reputadas del mercado del juguete sexual

El tráfico de mujeres ha existido en todos y cada uno de los tiempos y sólo está señalando que el hombre es machista, o sea falista y que sólo reconoce a la mujer como instrumento de su placer independientemente del de ellas. Bueno, para empezar, o lo haces o bien número Mas aun si no lo haces, no todo está perdido. No importa qué peculiaridades te haya dado la Madre Naturaleza, existen muchas cosas que puedes hacer para inclinar la balanza a favor tuyo. Los hombres preguntan continuamente en mi clase: ¿Me gusta a las mujeres si … ¿esto? ¿O bien eso? O lo otro. Desafortunadamente, mi contestación siempre y en toda circunstancia debe ser la misma. Depende de la mujer. Ningún estilo agrada a todos. Soy Anita, una rubia que trabaja como escort profesional en tu ciudad. También estoy trabajando como stripper en un pub. Si buscas una experiencia renovadora en la cama, entonces soy la chica de compañía perfecta para ti. Muchos especialistas occidentales del sexo aconsejan tener una vida de fantasía activa, y de hecho las fantasías pueden ayudarte a generar energía sexual cuando te complaces a ti mismo. Sin embargo, cuando estás con tu pareja, existe el riesgo de confiar en las fantasías sexuales. El intercambio de energía del yin y el yang con su pareja es real, no imaginario. Si concentra su atención sexual en un amante idealizado o en una imagen pornográfica, no va a poder sentir el flujo real y profundo de energía entre usted y su pareja. Las fantasías te impiden estar presente y apreciar lo realmente fantástico de tu pareja y tu potencial para experimentar las alturas del éxtasis juntos.

Esa es otra pequeña cita que tenemos que anotar

Y LA ÚLTIMA, LA OCTAVA LEY DE MURPHY. CUANTO MÁS CANSADO LLEGA UNO, MÁS GUERRA PIDE EL OTRO. ¡Estupendo! El sexo aplaca los nervios, reduce la tensión y distancia el agobio. Toda práctica sexual que lleve al clímax produce un efecto de relajación en el organismo. En el instante en que el coito acaba con el orgasmo, el cuerpo reduce sus niveles de cortisol, una de las hormonas responsables del estado de tensión. Una simple caricia mejora sensiblemente el ánimo, siempre que no sea la pareja la que causa el estrés. Seguro que eres buena comunicadora, si bien pareja, como otros hombres no lo son. De cualquier manera, damos por sentado que nuestro socio en cama, sabe o bien comprende nuestras necesidades, especialmente cuando lleváis bastante tiempo de relación. Además de hacer el amor físicamente, también lo podemos hacerlo con palabras. A eso se le llama sexo aural, hacer el amor sin llegar a la penetración. La próxima vez que estéis en cama, establece unas normas: el estado de ánimo positivo, con música relajante y charlar de lo que te gusta de él y al contrario. Dile lo que te gusta de su cuerpo, de la relación que os une y, mientras que estéis desnudos en cama y abrazados, susúrrale palabras bonitas acerca de lo que te gusta de él: la curva de su cintura, sus nalgas, su vello en el pecho, lo que te guste de él: seguro que hay miles y miles de cosas. Me encanta cuando tú … puedes pensar que él ya sabe estas cosas, mas no te olvides de que no está mal que se lo recuerdes: te verás retribuida.